«Existe un tema que muchos pasamos por alto, a pesar de su relevancia: las finanzas. Muchos de nosotros, hasta mi generación, provenimos de hogares humildes con escasas oportunidades, donde nuestros padres apenas recibieron la educación básica, si es que la tuvieron. Por lo tanto, no nos inculcaron ciertas prácticas que hoy en día son vitales para sobrevivir en un mundo en constante evolución.

El libro ‘Pequeños Titanes’ ha sido para mí, como padre, una guía que me ha permitido cambiar el rumbo y enfocar la crianza de mi hija Antonella hacia una mejor educación financiera. Siempre he tenido dificultades para hablar sobre dinero con otras personas y no quería que las respuestas que le diera a mi hija fueran simplemente “no lo sé hija, así funciona el mundo”, “ahorra porque es bueno para tu futuro”, “no te gastes todo en golosinas”. Quería ir más allá y proporcionarle una educación financiera sólida.

En ‘Pequeños Titanes’ encontré la respuesta. Ahora no solo sé cómo hablar sobre los aspectos más básicos del dinero con mi hija, sino que también me siento preparado para cuando llegue el momento de enseñarle conceptos y retos financieros más complejos. Este libro ha sido un tesoro en mi camino y tengo la certeza de que Antonella tiene un futuro próspero y de libertad económica por delante. Gracias, ‘Pequeños Titanes’, por ser mi salvavidas.»

“Desde temprana edad, me convertí en madre. Lejos de sentirme preparada, uno de mis mayores temores era no poder proporcionar una educación adecuada a mi hijo. Ni en mi hogar ni en la escuela recibí una orientación efectiva en términos financieros. Como resultado, he enfrentado situaciones de estrés económico en varias ocasiones. Mi hijo, dotado de una gran inteligencia, siempre está atento a lo que sucede. Me pregunta si estoy triste cuando no puedo pagar algo, me ofrece su apoyo e incluso me abraza. Su amor es incomparable.

En medio de esta situación, descubrí ‘Pequeños Titanes’, un recurso que llegó a mi vida en el momento perfecto y me abrió los ojos a un mundo de posibilidades para comunicarme de manera más efectiva con mi hijo. Recientemente, comenzó a hacer su propia alcancía porque quiere comprar el mismo balón de fútbol que su amigo del jardín infantil. Está emocionado trabajando en su plan de ahorros con mi ayuda.

Mi hijo es un ser maravilloso y ahora me siento mucho más preparada para guiarlo en este camino. Esto me brinda una gran tranquilidad y disipa el miedo que siempre había tenido.»